Hunter explora con las contradicciones nacidas del sentido británico por excelencia y de la excentricidad. En el centro de esta historia está el "Dazzle", una técnica pionera, los patrones son complejos y fueron pintados en barcos, creando un camuflaje que los hizo aún más visibles, llegando a confundir al espectador a través de la ilusión óptica. Hunter introduce este concepto a través de patrones e impresión en su colección, siempre en evolución, aunque la marca sigue siendo fiel a la bota original.